El Festival de Sitges ha empezado su primer fin de semana con mucha fuerza, programando grandes estrenos, donde destaca el cine francés con genialidades como la película de animación “Petit vampire” de Joann Sfar, y “Mandibules” la nueva locura surrealista de Quentin Dupieux, sobre dos amigos que tratan de sacar provecho económico de una mosca gigante.
También cabe destacar que a pesar de los difíciles momentos que está atravesando el mundo de la cultura, en el festival hay una amplia representación de producciones catalanas y estatales como “Malnazidos”, “La vampira de Barcelona”, «Baby«, “Un efecto óptico” y “No matarás”, demostrando que el cine fantástico está más vivo que nunca.