AudioVideoHD.com lamenta la muerte de este Artista Universal. De Enrique Morente nos queda ahora su alma y su obra. La inmortalidad le ha llegado al Maestro y entra a formar parte de la historia artística de nuestro país.
Descanse en paz Enrique Morente y demos paso a la leyenda.
Un duende que revolucionó el Flamenco
Información de Sergio de la Marca (Comunicación SGAE)
Con la muerte de Enrique Morente, la música popular se queda sin uno de sus emblemas. El autor granadino ha sido uno de los grandes renovadores del Flamenco y con su apuesta aperturista hacia otros estilos lo ha dotado todavía de mayor personalidad. En un pasaje de la película Cadena Perpetua, deFrank Darabont, el presidiario Ellis ‘Red’ Redding (Morgan Freeman) asegura que “algunos pájaros no pueden ser enjaulados, sus plumas son demasiado hermosas”, frase que resume a la perfección la concepción artística de este revolucionario del compás.
A pesar de que desde alguna ventana se le observara injustamente con recelo, Morente, -Premio de Honor de la Música en 1998, entre otras merecidas menciones-, siempre miró con respeto este género racial, que puso de manifiesto por su elevado conocimiento y por su capacidad para explorarlo con elegancia. De su generosidad como creador saben de primera mano, desde su compadre Pepe Habichuela a los norteamericanos Sonic Youth, referentes eléctricos de la experimentación. Y sí, seguramente Omega -disco que engendró con Lagartija Nick en 1996- que aunó Flamenco y Rock, poesía de Lorca y Cohen, tradición y modernidad, sea el mejor ejemplo, ni mucho menos el único, del quehacer vanguardista de este duende.
Porque con duende nació Enrique Morente. Sino no se explica que su matrona, el mágico barrio del Albaicín, lo arrancara de otro mundo, ese en el que habitan los genios, precisamente, una Navidad, el 25 de diciembre de 1942. A día de hoy, en fecha tan señalada, no se recuerda un regalo más auténtico, a juzgar por su rica aportación a la cultura, en el que talento y riesgo han estado cortados por el mismo patrón, el de la excelencia. En el tema que cierra el álbum La leyenda del espacio (2007), de sus camaradas Los Planetas, Morente cantaba (¡y canta!) Tendrá que haber un camino, en alusión a lo que vendrá después de la muerte… Eso queda para el misterio, para su otro mundo. En éste, como si trazara una parábola de la conocida leyenda del origen de la vida, el duende, alumbrado por una Estrella, ha dejado un camino: lleva el nombre de Morente.